1- Agua de Jamaica

El hibisco o flor de Jamaica es una excelente planta para perder peso, pues es rica en flavonoides, que son antioxidantes que evitan la acumulación de grasa en la barriga y en las caderas. Además, es un té diurético que promueve la eliminación del exceso de agua acumulada en el cuerpo y ayuda a reducir la grasa abdominal.

Ingredientes:

2 cucharadas de flores de Jamaica secas;
1 litro de agua al inicio de la ebullición.

Modo de preparación:
Para hacer el agua de jamaica y mantener las propiedades de la flor, se debe colocar el agua a hervir y cuando empiece a hacer ebullición, se debe apagar el fuego inmediatamente. A continuación, se deben añadir las flores, tapar el recipiente y dejar reposar durante 5 a 10 minutos, luego colar y beber.

Se debe tomar 2 tazas de agua de jamaica diariamente, antes o después de las comidas principales. También es posible tomar la infusión fría agregándole hielo o manteniéndola en el refrigerador.

Pese a que aún no tiene contraindicación comprobada, la ingesta de agua de Jamaica debe evitarse en mujeres embarazadas, en período de lactancia y en niños.

2- Té de jengibre  

El té de  jengibre es excelente para ayudar a perder barriga, pues tiene acción diurética que disminuye la retención de líquido en el cuerpo. El jengibre es termogénico, pues aumenta el metabolismo del cuerpo, haciendo que el organismo gaste mayor cantidad de energía. Asimismo, disminuye la absorción de grasa del alimento por el intestino y ayuda a controlar el hambre, reduciendo la ingesta de comida y contribuyendo a la pérdida de peso. Vea más sobre el té de jengibre para adelgazar. 

Ingredientes:

1 cucharadita (1 g) de raíz de jengibre descascarada;
1 taza de agua.
Modo de preparación:

Para preparar el té, basta añadir el jengibre y el agua en una olla y dejar hervir de 5 a 10 minutos. Apagar el fuego, tapar la olla y dejar entibiar para colar y beber. Se aconseja beber el té de jengibre máximo 4 veces al día.

El té de jengibre debe evitarse por niños, mujeres embarazadas o en período de lactancia. Además de eso, el jengibre no se recomienda en personas con piedras en la vesícula, en pacientes con problemas hemorrágicos o que tomen medicamentos anticoagulantes, porque el jengibre puede aumentar el riesgo de hemorragias en estos casos.

Las personas que usen medicamentos para controlar la presión arterial o la diabetes, deben consumir el jengibre solo bajo indicación médica, pues puede interferir en estos tipos de fármacos.

3- Agua de avena 

El agua de avena, además de ser una bebida llena de nutrientes, puede ayudar a adelgazar porque contiene fibra como los betaglucanos, que pueden reducir la sensación de saciedad y tener menos ganas de comer cosas dulces, consumiendo así menos calorías. Además de eso, la avena posee antioxidantes que ayudan a disminuir las células grasas del cuerpo, logrando de esta manera reducir el peso y la barriga. Conozca más beneficios de la avena.

Ingredientes:
2 cucharadas de salvado de avena;
1 litro de agua.

Modo de reparación:
Licuar la avena junto al agua, hasta que la mezcla esté homogénea. También se puede adicionar canela o jugo de limón para dar sabor. Es recomendado beber en la mañana en ayunas y antes de cada comida.
El agua de avena en muchas cantidades puede provocar gases e hinchazón por la cantidad de fibra.
El consumo de agua de avena en el embarazo o en el periodo de lactancia es probablemente segura, siendo recomendado consultar a un médico u obstetra antes de ingerirla.

4-Agua de fresas

El agua de fresas es excelente para ayudar a bajar barriga, pues las fresas no solo contienen pocas calorías, también son ricas en fibras, ayudando a aumentar la saciedad, disminuyendo así la ingesta de calorías. Además de eso, las fresas son ricas en antioxidantes, en potasio y tienen mucha cantidad de agua, generando un efecto diurético en el cuerpo para ayudar a eliminar la retención de líquidos, además de depurar el organismo y eliminar toxinas, ayudando así a deshinchar la barriga y a disminuir el peso. Vea más beneficios de las fresas.

Ingredientes:

1 litro de agua;
150 gr de fresas.
Modo de preparación:

Las fresas deben estar bien maduras. Lavar bien las fresas, colocarlas en una jarra y machacarlas con una cuchara de madera para liberar el jugo e intensificar el sabor de la fresa, hasta que quede parecido a un puré o de otra manera es triturar las fresas en una licuadora. Añadir el agua a las fresas, opcionalmente se puede adicionar un poco de zumo de limón u hojas de menta. Finalmente, refrigerar en la heladera de la noche a la mañana para que se concentre el sabor de las fresas o si se desea beber en el momento, se puede agregar algunos hielos.

El agua de fresa se puede beber en ayunas a primera hora de la mañana, antes o después de cada comida o cualquier momento del día.

No está indicado el consumo de agua de fresas en las personas susceptibles a tener alergias a los componentes de este fruto. Por otro lado, tampoco es recomendado el agua de fresas en personas que tienen diarrea, problemas del estómago o renales, como piedras en el riñón e insuficiencia renal.

Además de eso, el agua de fresa está contraindicado en personas que usan medicamentos para la presión alta, pues puede interferir en estos tipos de fármacos.

5- Té de alcachofa

Las hojas de alcachofa pueden emplearse para preparar té, pues este posee una potente acción diurética que ayuda a eliminar el exceso de líquido del cuerpo y a perder panza. Conozca más sobre los beneficios de la alcachofa.

Ingredientes:

5 a 6 g de hojas secas de alcachofa;
1 litro de agua.
Modo de preparación:

Hervir el agua, adicionar las hojas de alcachofa y apagar el fuego inmediatamente. Tapar y dejar reposar durante 5 a 10 minutos. Colar y beber durante el día.

El té de alcachofa no está indicado en niños, en mujeres en período de lactancia ni en personas con obstrucción de la vesícula biliar, cáncer en el hígado o hepatitis.